
Durante el verano el huerto da
muchos frutos y es muy fácil que algunos se echen a perder por no ser
consumidos. Si quieres aprovechar el exceso de frutos del verano y
consumirlos a lo largo del año puedes hacer tus propias conervas
ecológicas en casa. El tomate, por ejemplo, te da mucho juego, lo puedes
rallar, dejar entero, según vayas a utilizarlo en salsas, potajes,
pizzas, pasta, etc.
Debemos fijarnos que las verduras que vamos a usar estén en buenas condiciones y no estén picadas.
Elaborarión:
Una vez tenemos los
tomates limpios, los escaldamos durante 1 minutos para que se puedan
pelar fácilmente. Los rallamos y los metemos en el frasco donde lo vamos
a conservar (siempre de cristal), dejando el mínimo posible de aire en
el interior del frasco. Estos frascos los habremos esterilizado
previamente (los habremos hervimos durane 15 minutos, tanto el frasco
como la tapa)
Es importante que nos aseguremos de
que el bote está bien cerrado, sino se puede echar a perder. Para no
tener dudas, dejamos los botes bocabajo durante unos minutos. Si no se
“escapa” nada, todo va bien.
Seguidamente los introducirmos en la olla y los cubrimos totalmente con agua. Los vamos a hervir durante 45 minutos.
Una vez transcurrido ese tiempo, los
sacamos, secamos y etiquetamos con la fecha en la que han sido
elaborados, y los almacenamos en un lugar seco y fresco donde no reciban
luz.
Estas conservas nos pueden durar incluso varios años.
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