Cómo germinar semillas de limón?

Los limoneros además de dar el fruto del limón, son un árbol que adorna muy bien un jardín y ofrece un exquisito aroma cítrico. Si bien pueden llegar a demorar varios años en dar frutos, la espera vale la pena porque una vez que comienzan a hacerlo, la producción es muy buena.

Las semillas de limón pueden utilizarse para germinar y luego plantar tu limonero en tu jardín. Lo importante es que una vez que se extraen las semillas del limón, se conserven húmedas hasta que se planten en la tierra como se indica a continuación en los siguientes pasos sencillos:

Instrucciones

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   El primer paso para germinar semillas de limón, Cortar el limón a la mitad y sacarle las semillas cuidadosamente con la ayuda de una cuchara o cuchillo.
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   Enjuagar bien las semillas de limón con abundante agua, sacándoles los restos de pulpa y jugo. Posteriormente secarlas con una servilleta de papel.
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   Colocar tierra en un semillero pequeño, dejando, aproximadamente, 1 centímetro entre ésta y el borde y regar para que se humedezca un poco.
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   Colocar las semillas de limón en la tierra para germinar, dejando un espacio entre ellas de, aproximadamente, 6 centímetros y cubrirlas con una capa de tierra de alrededor de 2 centímetros.
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   Colocar papel filme plástico sobre el semillero y fijarlo con cinta para que no se corra.
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   Colocar el semillero en un sitio cálido a una temperatura, aproximada, entre 20 y 25º C.
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   Regar con regularidad para humedecer la tierra, sin dejar que se seque del todo nunca, para permitir germinar las semillas de limón.
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   Una vez que las semillas de limón comienzan a germinar, retirar el papel filme y colocar el semillero en un lugar soleado.
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   Una vez que de los brotes de las semillas que han comenzado a germinar, aparecen unas pequeñas plantitas, mudarlas hacia una maceta más grande de, aproximadamente, uno 15 centímetros con tierra nueva, para que tengan más espacio para crecer.
   
   
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    Una vez que las plantitas se transformen en pequeños arbolitos de, alrededor, de 16 cm, transplantarlos nuevamente pasándolos a un cantero o macetero muy grande, a la misma profundidad que estaba, en el jardín exterior donde le de la luz del sol. Esto va a permitir que sus raíces se extiendan y el árbol crezca. Lo ideal es plantar el limonero durante el invierno, cuando está en reposo. Es un árbol que requiere mucha agua y requiere un riego parejo durante todo el año.